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Buenas noches a todos.
Buenas noches, señora Inspectora Jefa de Región 6,
Licenciada Ballesteros.
Buenas noches a los miembros de Comisión Directiva,
a los colegas directivos, a los colegas docentes, a los
padres, madres, familias, amigos.
Y sobre todo, esta noche, a los egresados 2021, que hoy
ya son nuestros exalumnos.

Es muy particular comenzar el año con una
graduación. En treinta años de educación es la primera
vez que lo veo. ¡Pero me alegra tanto encontrarnos
Florencia Noguera acá! En la última graduación que tuvimos aquí mismo,
en 2020, éramos muy poquitos. Los chicos estaban
sentados con distancia, todos con barbijo, no les podíamos dar los diplomas, las
familias no podían venir, todos mirándolos por streaming. Así que, aunque sea en
marzo o en febrero, o si hubiésemos tenido que hacerlo dos meses después, por eso
nos alegramos que esta graduación resulte lo más parecido a la graduación que
todos soñaron.
En sus discursos, tanto el Sr. Wehmann como la Sra. Friedrich, hablaron de la
flexibilidad y de lo que significó adaptarse estos dos años. Yo fui testigo de todas las
adaptaciones que ustedes vivenciaron junto a los profesores que los acompañaron.
Como se mencionó también en los discursos anteriores, ustedes egresan del colegio
con un bachillerato trilingüe, con formación académica, con exámenes internacionales,
que en realidad son conocimiento. Muchas veces se confunde conocimiento con
sabiduría. Me parece que, el haber atravesado dos años tan adversos a ustedes les
permite salir del colegio no sólo con conocimiento sino también más sabios, y esto
es importante. Porque la sabiduría viene de la experiencia. Se puede tener mucho
conocimiento, pero estar lejos de la sabiduría. Y yo a ustedes los vi crecer en sabiduría.
Más allá de lo que creo, crecimos todos en aceptar. Como decía Marcela en su discurso,
en realidad uno da por sentadas muchas cosas y piensa que la vida va a ser como la
planifica. Y de repente nos dimos cuenta que eso no es así, aunque lo sabemos, estos
dos años lo experimentamos.

Los vi adaptarse, al pasar repentinamente, en menos de una semana, de una
escuela de 124 años (el año pasado) de educación presencial a una educación
completamente virtual. Todos juntos lo logramos. También los vi adaptarse en lo
no académico: en las reuniones virtuales de los representantes de alumnos de los
distintos cursos; pensando la manera creativa de juntar dinero para lo que iba a ser
el viaje a Alemania del año pasado: proponían ferias online, juntaron arándanos y
surgieron también otras ideas que no se pudieron concretar; pasaron de hacer música
presencial a hacer música virtual; algunos se convirtieron en periodistas online, otros
hacían radio por podcast. ¡Todo creativamente! O sea, muchas y diversas acciones que
demostraron la actitud de este grupo. La actitud de sobreponerse, y eso es lo que se
llevan.

Después de estos dos años se van con un aprendizaje que tal vez no han
concientizado aún, pero que lo van a tener para siempre. Creo que la pandemia nos
atravesó a cada uno, a la sociedad, y a nosotros como comunidad, y todavía no somos
conscientes hasta qué punto. En esta pandemia hubo mucho dolor y muchos hoy no

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