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y luego averiguar poricue' 41
/irrea1izab1e, comoJ

lo es. -Pero sia' eim)le y dtii eer !reuntr qu es lo
eeerai.io eerjio
que' es l que no c4 -.€/T maestro en

lc circunttancias e.ietentes.
¼& tp-.4
Lo primero que esieran1os de el ec ,/una mirada clara, cue ob

serve oier loe hechos y no se jrec i:it.e en los juic ioe. 'Uafldo

las rimsras im2reeioriec no reflexivas sn exactas, lo con tam-

bie'n ls Trimeros juicios; cuando n' se apr'an en una observa-

cin clara, aqLilios recltan erradrc.
'e £4A 't..
l aleui que af5nr jiriLera veztierru extranj±a 11v
5 1Li).L'e /
ti consigo, dese o no cuenta xi de ello4,un edacito de

tierra atria. Y es uerio que ac suceda; ya que el hechizo

ms atreyerte de la erc r nalidad rocede de este fondo r'ermanen

te de nuestro ser. ero rio hay que olvidar que jatria significa

no clo rofunuidad y calr sino tambie'n a xM nBnudo estre-

chez y liniitacicSn. Neceeitarilnb hoiibres cuyo sentimiento jatrio-

tico se haya aecarr'ilado antes e venir al j as hasta asumir 1
nacional ,-çue 105 ha'a adquirir
la forme 'cent imient o d° conc ieic ia de que sn

alemafles y nada ins que ale:nes, conciencia ms necesaria ab

çu tX nunca aflt05) .-ier ellos han de traernos l viento

fresco de la nueva e'jca y vivificar con a los que aqi

se han vuelto lnguidos y tioi; han de traer calr y vida al

aire, a menudo enrarecido y fri(o )de nuetrac escudas; han de

ser lo hruldos y ortudore del espritu nacional aldmn redi•

vivo. Y ha ae ser todo esto de una inaner

exclusiva y sin retriccioñec oc uiruuna clase. .l ue vie:Le a-

qui solamente por una breve