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Buenas noches a todos,
al Director General del Colegio,
al representante de la Embajada Alemana,
al representante de la Comisión Directiva,
al Vicedirector Alemán,
a Martin,
hoy Mariana Aragón, la Vicedirectora Argentina,
no pudo estar, pero les manda un afectuoso saludo
a todos,
a todos sus padres y sus docentes que hoy no nos
pueden acompañar,
y, especialmente, ¡a ustedes!
Florencia Noguera
Yo recién los veía a todos sentados, con su silla, su
banco de colegio al lado, y decía: “parecen una clase”. Y digo, tenemos en la última
noche de ustedes del colegio lo que no tuvieron en todo el año. Y me parecía como
significativo, porque, de verdad, en este año tan especial ustedes siguieron el colegio
en sus casas, en distintos lugares, distintas sillas, camas, sillones, pero no estuvieron
sentados como lo están hoy en un banco, en un pupitre del colegio. Entonces, pensaba
yo en este año que les tocó.

Es difícil minimizar lo que pasó, porque lo que pasó fue enorme, a ustedes y a
todo el mundo, a cada uno de los seres humanos, es la primera pandemia global en
el sentido más literal de la palabra global. Siempre hubo distintas pestes y distintas
pandemias en el mundo a través de la historia, pero nunca en una simultaneidad de
todos los continentes como fue esta.

Y a ustedes les tocó, en este año, su último año en el colegio. Y fue, y termina siendo
también hoy, muy muy distinto de lo que todos habían pensado. Entonces, yo no quiero
minimizar lo que no fue, porque todos tienen en la cabeza lo que habían pensado que
iba a ser en este año. Pero creo que es importante que podamos destacar lo que sí fue
este año para ustedes. Porque, docente al fin, yo no puedo dejar de ver este año como
un año de grandes aprendizajes.
Creo que el primer aprendizaje para todos fue el valor de las cosas simples,
cotidianas, que dábamos por sentado y que de repente no tuvimos más. El venir al
colegio, el encontrarse con los amigos, el poder estar en el recreo, el poder juntarse
los fines de semana, sobre todo los primeros meses de pandemia, que el aislamiento
fue tan estricto, el practicar un deporte, el encontrarse en otras circunstancias,
el poder ver y abrazar a sus abuelos… Muchas cosas que nos parecían comunes y,
de repente, a veces hay que perderlas para valorarlas. Entonces, creo que este es el
primer aprendizaje.
El segundo aprendizaje, y que me parece muy importante para el futuro, es que
todo lo que nosotros pensamos que tenemos controlado y que sabemos lo que viene,
este año 2020 nos demostró que no es así. Y esto, para mí, para ustedes que van a
salir ahora al mundo, es una oportunidad. ¡Por qué! Porque en vez de tener que hacer
las cosas como se hicieron siempre, ustedes tienen la oportunidad de pensar cómo
hacerlas diferente. Porque como las hicimos siempre, por lo que estamos viendo, no
dio resultado. Así que creo que la generación que atravesó esto, y que está atravesando
esto a la edad de ustedes, tiene una maravillosa oportunidad para cambiar el mundo
y hacerlo un mundo más amigable para todos.

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