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OTRO AÑO EN LOS JARDINES
DE NUESTRO COLEGIO

Si tuviéramos que evaluar este año desde el punto de vista de lo ocurrido en los
parques y jardines del colegio, podríamos decir que fue un año de consolidación para
Kindergarten y Primaria y el puntapié inicial para la intervención de los parques de la
Secundaria. Durante estos últimos tres años desde que se lanzó el proyecto “Vistamos
de verde nuestro colegio”, se trabajó con mucho entusiasmo no sólo para mejorar las
áreas exteriores de esparcimiento de ambos niveles iniciales (Kindergarten y Primaria)
sino también para embellecer esos mismos espacios y todos aquellos canteros que
rodean los edificios. Ahora vemos que nuestros esfuerzos están dando sus frutos, los
arbustos van cobrando forma y tamaño y cada vez disfrutamos de más flores. Basta
pasar por el sector del oso en Primaria para poder apreciar estos cambios. Además,
este año hemos puesto especial énfasis en transmitirles a los chicos que entre todos
cuidamos las áreas verdes para que también todos podamos disfrutar de ellas. Con esta
campaña de concientización sobre el respeto hacia la naturaleza apuntamos a lograr
que los chicos aprendan lo importante que es cuidar las plantas en particular y que se
involucren con el cuidado del medio ambiente en general.
Con el objeto de acercar aún más la naturaleza a nuestros alumnos y de llenar de vida
los interiores de nuestros edificios, el Departamento de Mantenimiento del colegio nos
proveyó dos estanterías de hierro pintadas de verde que colocamos en las ventanas del
segundo piso del edificio de Primaria, justo al lado del puente que nos lleva al Pabellón
Volkswagen, que llenamos de macetas con plantas suculentas. La idea es invitar a los
docentes y a sus alumnos a turnarse para cuidar esas plantas e incluso, si quieren, que
hagan aportes de especies que no tengamos. Utilizamos contenedores de diversa
índole, desde macetas propiamente dichas hasta tazas recicladas e incluso mates en
desuso y, de esta forma, logramos armar un rincón que atrae la atención de todos.

Como ya es habitual en nuestra huerta de Primaria, este año ha ocurrido de todo.
Además de los diferentes tipos de hortalizas que de marzo a noviembre los chicos
siembran o plantan en sus bancales y luego cosechan y consumen, en agosto un grupo
de alumnos plantó 20 papas y, para su sorpresa, en noviembre cosechó 150, que luego
cocinaron en su hora de Sachkunde, una experiencia que resultó inolvidable. Otro grupo
de alumnos de segundo grado sembró semillas de tomates a partir de rodajas de este
fruto y luego de dos semanas pudieron apreciar cómo asomaron las pequeñas hojitas
de las nuevas plantas. La actividad en la huerta genera tanto entusiasmo que Ricardo
Núñez, nuestro dedicado jardinero, tuvo que improvisar un bancal nuevo para que todas
las clases tuvieran su lugar para experimentar. También tuvimos maíces y girasoles en
los bancales sobre la pared del galpón pero la protagonista principal este año y el gran
atractivo de nuestra huerta, sin duda, fue la mesa de hidroponia donada por Tomás
Henschel, padre del colegio, y su socia Andrea Kuhk, también exalumna, donde grandes
y chicos pudimos aprender otra forma de producción de lechugas, sin tierra, basada en
la circulación de agua con nutrientes.
También en Kindergarten hubo novedades. Además del funcionamiento de los
diferentes cajones de huerta con los que contamos en la terraza, en el patio, en maternal
y en el puente que une al edificio con Primaria, se armó un cantero nuevo de plantas
Euryops frente al arenero circular, se agregaron hortensias y se colocaron panes de
césped debajo del jacarandá del patio. Como todos los años en primavera, las maestras
y los chicos, con gran dedicación, colgaron florales de estación en botellas plásticas
adornando el patio.

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