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ESTEBAN GONZÁLEZ RITTLER
               Esteban Gonzalez Rittler inició su carrera docente en la Goethe-Schule, donde
            además cursó toda su escolaridad, en el año 2010. Se encontró entonces con esa
            extraña sensación de tener colegas que tiempo atrás habían sido sus profesores.
            Se desempeñó como docente de Historia, Construcción de Ciudadanía, Política y
            Ciudadanía y Sociología. Estuvo a cargo del Taller de ONU y también fue profesor
            consejero.  Pero no solo eso sino que también tuvo una excelente relación con todos
            sus estudiantes. Prueba de ello es que han compartido partidos de fútbol fuera del
            horario escolar, que acompañó a la promoción que egresó en 2018 durante su viaje a
            Alemania e incluso  formó parte de un grupo de música integrado por docentes y tocó
            la batería en alguna cena de egresados.
               La Historia no es su único interés, el fútbol también lo apasiona. Fueron muchos los
            lunes que, tanto en los pasillos como en la sala de profesores, luego del primer saludo
            de la mañana hacía comentarios, generalmente irónicos, sobre los resultados de los
            partidos del fin de semana y expresaba su alegría o desencanto por el desempeño de
            Boca o de la selección nacional.
               El paso del tiempo demostró no sólo su profesionalismo dentro y fuera del aula, su
            inquietud por el conocimiento y el estudio permanente, sino también su empatía y
            calidez con sus compañeros de trabajo.
               Un día decidió ejercer la docencia en Berlín y allí está hoy. Además de estar
            reorganizando su vida y su profesión, se está reencontrando con quienes fueron
            sus alumnos y con colegas de trabajo. La pandemia le impidió venir de visita en el
            2020 pero mantuvo contacto con muchos de quienes fuimos sus colegas e incluso
            con algunos planificó trabajos colaborativos para llevar adelante entre estudiantes
            de la Goethe-Schule y de la Friedensburg Oberschule, donde trabaja actualmente.
            Auguramos la continuidad de este vínculo que nos permitirá acortar las distancias y
            seguir unidos como docentes.
               Sabemos que no deja de pensar en su viaje a  Argentina y que vendrá de visita
            cuando las condiciones lo permitan. Mientras tanto, la tecnología nos mantiene en
            contacto y, aunque ya lo sabe porque se lo hemos dicho personalmente, no está de
            más reiterar aquí, que le deseamos lo mejor en todo lo que emprenda.

                                                                           María Correale






















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